Cristo del Refugio
Atribuido a Gutierre Gierero, ca. 1520.
Santa María Magdalena
Atribuido a Sebastián Solís, ca. 1593.
Virgen de la Correa
Ramón Amadeu, 1745 – 1821
Un retablo neoclásico diseñado por Manuel Martín Rodríguez en 1793, acoge una de las obras más antiguas de la catedral y de gran veneración, el Santísimo Cristo del Refugio. La talla se atribuye a escultor flamenco Gutierre Gierero (ca. 1520), autor también del Santísimo Cristo de las Misericordias y que trabajó en la sillería del coro. A sus pies aparece recostada Santa María Magdalena, obra atribuida a Sebastián de Solís (ca. 1593) que podría haber formado parte del retablo de la capilla del conde del Villar en la catedral vieja.
Sobre la mesa de altar se ha situado a la Virgen de la Correa o del Mayor Dolor, como se refiere a ella la documentación capitular. La talla se atribuye a Ramón Amadeu, al igual que los dos ángeles plañideros que actualmente acompañan a la Virgen de las Angustias. La Virgen de la Correa fue regalada por el chantre don Luis Javier de Garma y Moreno, que también costeó su retablo neoclásico, erigido en la antigua capilla de San Pedro Pascual. En 1845 la Virgen de las Angustias se colocó en el retablo de la Virgen de la Correa y se trasladó a esta talla a la sala capitular, llegando finalmente a esta capilla tras varias ubicaciones.
En el lateral derecho encontramos un pequeño retablo barroco que acogió una bella pieza flamenca en alabastro que se conserva actualmente en la Exposición Permanente de la Catedral. Frente a él, podemos ver un lienzo que representa a un clérigo ante una imagen de la Inmaculada, que quizás pueda tratarse de un retrato del deán don Íñigo Manuel con la talla de la Concepción Vieja.